miércoles, 6 de mayo de 2009

the nothingness

El suspiro del exilio me anuncio,
Tan solo borroso se me aparece el horizonte, difuso
Y soy como quien quiere encontrar alguna respuesta

¡Nada!

Te imagino rodeándome
Y las agonías hacían guardia tras tu espalda
Y soy como quien rebusca algún rincón para refugiarse

¡Nada!

Inhalando cada átomo de ti
Aire que enmudece mis sentidos
Y mis sombras que están entre tus manos

Nada, estas tan llena de nada
Y no logras encontrar una salida
¡Se te entrecorta la vida!

Tras los muros del silencio
Logro resguardarme y ahora
Yo soy la que me parezco a la nada…

¡Nada!

Inerte
Y soy como la duda
Que busca masturbar todos tus sentidos

viernes, 1 de mayo de 2009

Sin remitente, ni destinatario V






Y profano tus recuerdos para enaltecer mis memorias buscándote en otros besos, en otros cuerpos, en otras voces… buscándote en otras personas.

En ese idilio de encontrarte en donde nunca te hallare; en las copas, en las botellas, en los sorbos, en los suspiros, en las notas, en los aromas, en los reflejos de otros ojos y tal vez en un beso, de esos, que por la ebriedad se dan en algunas esquinas de calles y bares, de voces y música, de conocidos y desconocidos, de encuentros y separaciones; solo me han quedado seis monedas, cantidad suficiente para cubrir el costo del regreso, ese en donde recorro toda la ciudad de noche guiada por la estela de alcohol que derrama mi mirada, bajo ese cielo oscuro, con el golpe de aire fresco colándose en mi cabello; y así repaso mirando las caras nuevas, desconocidas, frescas, para buscar sin sentido tu rostro en el de los demás.

Mas, sin embargo, se que tu también haces afán de la misma tarea, y tal vez no conmigo, y no me incomoda, ambos sabemos quiénes somos, o al menos eso pretendemos, amantes de esa búsqueda de la nada en el tiempo, en el espacio, en los cuerpos, en las palabras, en los alientos sofocados… Reflejos de lo mismo en cuerpos separados.

Por lo tanto querido mío, te recuerdo que soy de nadie, al igual que tu, esa soy yo, la que te ama y ama con demasiada liviandad; la que te busca en donde no estás, la que no se detendrá ante las memorias cálidas de aquellos encuentros… la que buscara sin cansancio entre sabanas nuevas las caricias del ayer.




"Me enamoro facilmente, es mi formula para ser miserable"
Béatrice (Petites Coupures de Pascal Bonitzer)