martes, 11 de mayo de 2010

No debería de estar haciendo esto ahora, tengo muchas cosas que hacer (TODAS atrasadas) pero estoy aquí postergándolas un poco más; hoy sera un día largo, cansado, que solo es una extensión del que sigue, no se si es por eso que estoy aquí en busca de un refugio que me aleje solo unos minutos de ello. El punto es aquí estoy con un post que hacia meses lo tenia y solo no me había tomado la molestia de compartirlo; también, no recuerdo si lo he mencionado en mi ultimo post, muchas cosas han cambiado, demasiadas... y entre ellas es que mis redactores (si, si tengo/tenia redactores por que si no no hacia nada de nada) se han mudado y nuestros diálogos son mas esporádicos y de menor tiempo por las ocupaciones nuevas que tenemos en eso a lo que todos le llaman "vivir"... Una disculpa, sobretodo a ti Kaede, que me da la impresion de que te he dejado igual o mas olvidada que este blog; y eso que yo era siempre (como en tu post anterior siempre) la que te instigaba.

No prometo escribir en los próximos días o semanas, yo nunca prometo nada a menos que tenga la certeza, pero lo que si es que sucedera aunque para ello pase un poco de tiempo.

PD. "Nunca olvides escribir"
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Imaginemos que esto es varios meses atrás cuando un perfume nuevo es introducido y nos bombardeaban con ello en la televisión, si no es así o al menos no sin esa explicación absurda, siento que no tendría mucho sentido del como nacieron esos pequeños párrafos que ahora siguen.





La esencia de una seducción… esa frase me dejo pensando mucho, me encontré curiosamente en el ocio con ese comercial que me atrapo en un principio por la música y después de elevar mis ojos a la pantalla las imágenes del video que me parece sumamente hermoso, bien hecho y adaptado.
Lo anterior no es más que una introducción, no soy una persona interesada en las marcas, ni me la paso checando los canales para encontrarme las cosas novedosas como hobbie, ese comercial llego a mis ojos por pura casualidad y la canción, por nostalgia o por cualquier otra patrañeria o patanería sentimentaloide hicieron que de verdad me atrapara y en esta ocasión, a pesar de haber escuchado la canción quizás, quizás, quizás infinidad de veces en diferentes versiones nunca me había clavado tanto la frase: “Siempre que te pregunto, que cuando, como y donde, tu siempre me respondes: quizás, quizás, quizás.”

Y veo la “película” del comercial con la frase inicial de la esencia de una seducción, y me pregunto hasta cuando el quizás nos mantiene en la expectativa de un encuentro, no necesariamente sexual (pero no hay que negar que a veces estos nos hacen aferrarnos un poquito más por la siempre mórbida curiosidad). Hasta que punto nos enganchamos con una nadería, con un supuesto, con una promesa, con una quimera en el horizonte, con la fe (oh! Maldita fe!) de que lo que deseamos, aunque no sea tanto, sucederá… como nos encaprichamos con figuras de humo que se desvanecen en el aire, que nos seducen con un canto de sirena que nos llevan a perdernos del rumbo que teníamos, dándole prioridad o privilegios a cosas que son inexistentes. Hasta que punto realmente nos dejamos envolver por el propio (nunca el efecto del otro más que el de uno mismo) convencimiento de que de una forma u otra lo lograremos; en ocasiones se da pero también hay que admitir que sabemos cuándo una promesa será cumplida y cuando solo nos toman el pelo, pero estamos ahí , en la línea, incluso algunos perdiendo la propia dignidad ( y no pretendo ofender) pero así somos, nos gusta que nos tomen el pelo porque la fantasía, porque el imaginario, porque la dulce opción de un pedazo de paraíso terrenal fatuo son mejores que mirarnos a la cara y decirnos no sucederá.

No diré que no lo he hecho, tampoco que no me lo han hecho, menos que no he caído en ese viejo artilugio siempre en boga, pero al menos hay un punto donde creo poder reconocer, si bien me va desde el principio, recordando que con nosotros siempre aplicara “A’según el ánimo es la cosa”; que es un simple juego, es el juego de esos niños malcriados que les gusta decir ten y quitan la mano cuando ya estas cerca, siempre constantemente ofreciéndolo sin darlo y riéndose de las reacciones… en fin tal vez por esto me agrade un poco más la línea que la versión en ingles dice:

“So if you really love me, say yes. But if you don't, dear, confess. And please don't tell me: perhaps, perhaps, perhaps”

Se cuando decir basta, se cuando decirme basta, y por lo mismo se decir adiós.